Nápoles, a menudo aclamada como la cuna de la pizza, tiene una reputación que la precede. Sin embargo, esta bulliciosa ciudad enclavada en el corazón del sur de Italia no es sólo un paraíso para los amantes de la pizza; es un tesoro escondido de cultura, historia y belleza escénica esperando ser descubierto. Más allá del tentador aroma de las pizzas napolitanas, Nápoles revela un mundo de artes vibrantes, maravillas antiguas y paisajes impresionantes.

En la laguna de Venecia, Murano atrae a los viajeros con su encanto atemporal y atractivo artístico. Esta pintoresca isla, a sólo un corto trayecto en vaporetto desde Venecia, tiene la clave para una experiencia mágica que trasciende lo ordinario. Al llegar a las costas de Murano, será recibido por un ambiente cautivador que habla de tradiciones centenarias, maestría artística y un rico tapiz cultural.